Marco Najar es óptico de formación. Y aunque su carrera ha cambiado de dirección hacia el rol de delegado de ventas, su trabajo diario aún requiere un enfoque preciso y una visión clara. “Me siento útil cuando ayudo a las personas a tener una mejor calidad de vida”, dice. “Eso es lo que motiva a todo los equipos de Grünenthal en todo el mundo y lo que inspira nuestra visión compartida de un Mundo Sin Dolor”.

Aunque el trayecto profesional de Marco ha seguido una ruta poco convencional, no es del todo sorprendente si se considera la conexión cercana de su familia con la industria farmacéutica. Su padre fue también delegado de ventas y su hermana también trabaja en este campo. Ahora, Marco compara el ambiente positivo en Grünenthal España con la calidez de una unidad familiar. “La forma en que nos tratamos aquí es como en ninguna otra empresa que haya conocido”, afirma. “Hay un espíritu de colaboración que se extiende a través de departamentos y fronteras geográficas. Cada miembro del equipo es realmente valorado y apoyado”.

Desde que se unió a Grünenthal en 2009, el ex óptico ha visto grandes cambios en el tratamiento del dolor. En particular, describe cómo los médicos más jóvenes utilizan un conocimiento más holístico del dolor al tratar a los pacientes. Para seguir ampliando ese conocimiento, Marco ofrece formación continua a los profesionales de la salud que participan en el manejo del dolor. “Nuestros cursos de formación abarcan toda la gama de especializaciones, desde medicina y enfermería hasta farmacia, fisioterapia y rehabilitación”, comenta. “Este enfoque holístico garantiza que cada paciente reciba el mejor tratamiento posible, considerando múltiples ángulos para diagnosticar con precisión su condición e identificar la medicación óptima para el dolor”.

La innovación es otro tema clave para Marco. Él destaca la importancia de explorar proyectos de investigación y desarrollo con el potencial de ofrecer tratamientos más efectivos para los pacientes con dolor. “Nuestros medicamentos, líderes a nivel mundial, mejoran la calidad de vida de las personas con dolor”, dice.

Ese entusiasmo por el futuro es característico de la actitud de Marco hacia su trabajo en Grünenthal, donde ya ha pasado 15 años apoyando mejores resultados para los pacientes con dolor. “Me sentí muy motivado por la visión de nuestra empresa desde mi primer día en el equipo, y hoy sigo sintiéndome igual”, afirma. “Grünenthal es como una familia y estoy muy feliz de que mi carrera me haya llevado aquí. Juntos estamos logrando un impacto positivo verdaderamente visible en la vida de los pacientes con dolor y también en sus familias”.